Reseña: Ana, la de Tejas Verdes- Lucy M. Montgomery.

• Autor: Lucy Maud Montgomery.
• Formato: Tapa Blanda || Digital Ebook.
• Editorial: El Toro Mítico.
• Páginas: 344.
• Temática: Drama, Aventura.
• Disponibilidad: casadellibro.com || gandhi 
• ISBN: 9788496947924.

Cuando en lugar del chico huérfano que pretendían adoptar, Ana Shirley, una niña pelirroja de once años, aparece en las vidas de Marilla y Matthew Cuthbert, dos hermanos solteros que viven en su casa familiar de Tejas Verdes, en el pequeño pueblo de Avonlea, sus vidas y las de cuantos la rodean cambiarán para siempre. Con su vivacidad, risas y lágrimas, y sobre todo su alegría e imaginación, Ana conseguirá formar parte, por primera vez en su vida, de una familia, y tener un lugar al que podrá llamar hogar para siempre. 

Ambientada a principios del siglo XX, en un lugar tan mágico como Prince Edward Island, en Canadá, Ana, la de Tejas Verdes nos llevará a través de los ojos de esta despierta e inocente niña a sentir el mundo como algo totalmente nuevo, a emocionarnos y reirnos con sus ocurrencias, y en definitiva, a ver la vida desde un prisma más positivo y estimulante. Esta obra, al igual que toda la serie de Ana Shirley, conjuga los valores de la vida rural y la familia con las cuestiones universales que todos nos plantearnos en algún momento, como la pertenencia a una tierra, el valor de la amistad o la esencia del amor.

¡Buen día, Nadadores! Espero que estén bien por esta entrada a clases, a muchos nos supuso más dificultad que a otros por el cambio de horario, además de que tuve un par de problemas personales el día de mi cumpleaños que nos hicieron pasar un gran susto, pero poco a poco nos vamos adaptando a la vida cotidiana que está volviendo poco a su cauce. 

Hace tiempo tuve la oportunidad de leer en el blog de Yoneri, La vida de una Lectora, una reseña acerca de una chica pelirroja bastante curiosa que me llamó la atención así que sin dudar decidí apuntarlo en mi TBR, ahora vengo a contarles un poco acerca de una niña bastante especial. 

¿De qué va entonces Ana la de Tejas Verdes?

Los Cuthbert son un par de hermanos mayores que viven en un lugar de Nueva Escocia, la mágica Prince Edward Island. Ambos son bastante viejos como para conseguir matrimonio o concebir un hijo, así que al ver que a una conocida le había funcionado bastante bien el adoptar un hijo, deciden buscar a algún chico para la tarea, encomendándole la tarea a su conocida e íntima amiga. 

Sin embargo, nada es lo que esperaban. Y es que pues al buscar en la estación de trenes el niño a recoger, se encuentran ni más ni menos que con una chiquilla pelirroja que dice ser la que había sido elegida para formar parte de su nueva familia. 

Esta mañana tengo bastante hambre. El mundo no parece una cosa terrible como anoche. Estoy muy contenta de que sea una mañana de sol. Pero también me gustan las mañanas lluviosas. Toda clase de mañanas son interesantes, ¿no creen? No se sabe qué ocurrirá durante el día y hay un gran campo para la imaginación.

La mencionada es Ana Shirley, una chiquilla pelirroja de once años, soñadora, que habla hasta por los codos y quien encontró en Matthew Cuthbert un alma afín en quien depositar su confianza. Todo cambia cuando llega a Tejas Verdes y conoce a Marilla, la hermana del mencionado y que desde un principio presenta la negativa de recibir a la niña por no ser lo que había pedido desde un principio. 

Decide regresarla desde donde vino pero antes de hacerlo piensa mejor las cosas y decide darle la oportunidad a la niña de vivir con ellos y formar una familia, posteriormente un hogar. 

Hablando de los personajes, tenemos de los más variopintos esta vez. 

Ana Shirley es una chiquilla pelirroja de once años. Soñadora, a veces imprudente y que habla hasta por los codos será una nueva luz para los Cuthbert. Es terca, de carácter fuerte y con unas ansias enormes de pertenecer a algún lugar. Es sumamente inteligente para su edad, a veces se pierde en sus pensamientos y cuenta con un exceso de imaginación. Suele decir todo lo que piensa, muchas veces hace expresiones poéticas de las cosas así como palabras rimbombantes para describirlas. Le cambia de nombre a los objetos para embellecerlos. Es vanidosa. No le gusta el color de su pelo ni sus pecas, ya que en su lugar hubiese preferido ser regordeta, con mejillas rosadas y cabello castaño. Cuenta que le hubiese gustado llamarse Cordelia, ya que el nombre de Ana le parece insípido y demasiado común. Es cariñosa, traviesa y a veces algo desobediente.

Siento que hay un montón de Anas distintas dentro de mí. Algunas veces pienso que ésa es la razón de que yo sea una persona tan cargante. Si fuera siempre una sola Ana, sería mucho más cómodo pero también muchísimo menos interesante. 

Marilla Cuthbert es la encargada de la crianza de Ana, así como su nueva especie de madre sustituta. Es una mujer estricta, de carácter fuerte y que no permite traslucir sus sentimientos por temor a salir dañada. Es quien intenta llevar a Ana por el buen camino, a veces castigándola y reprendiéndola. Fuera de ello, es una mujer con nobles intenciones. En sus tiempos libres acostumbra a hacer labor de tejer, es pulcra en su casa y bastante ordenada. 

—En cuanto a tu charla, no me molesta. Me he acostumbrado a ella. —. Ésta era la manera que tenía Marilla de decir que le gustaba oírla.

Matthew Cuthbert es el hermano de Marilla y una especie de amigo para Ana ya que no se considera a sí mismo para la crianza de la niña. Es bastante tímido y taciturno. Tiene un inmenso miedo de tratar con las mujeres, siendo la excepción Ana, Marilla y la Sra. Rachell. Disfruta de trabajar en el jardín y es el que malcría y consiente a Ana. Siempre está dispuesto a escucharla. Su carácter es apacible y se percata de las cosas con facilidad. 

No abandones tu romanticismo, Ana. Un poquito es bueno; demasiado , no, desde luego. Pero guarda un poco, Ana, guarda un poco.

La Sra. Rachell Lynde es la típica vecina chismosa del pueblo. Al principio se muestra bastante reticente de la nueva adquisición de Tejas Verdes, haciéndole un desprecio pero poco a poco va a percatándose de las buenas intenciones de la niña y comienza a apreciarla. Tiene buen corazón a pesar de la actitud a veces snob que presenta. 

Diana es la mejor amiga de Ana. Es una chiquilla algo morena, regordeta y de mejillas sonrosadas. Es cómplice de las salidas de la pelirroja. Se quieren y aprecian mucho, complementándose la una a la otra. 

Ahora bien, no me imaginaba lo mucho que iba a gustarme este libro. Lo cierto es que lo inicié con un poco de miedo porque no sabía del todo acerca del qué iba encontrarme y me dio gusto lo que pude hallar en su lugar. 

Es hermoso volver al hogar, cuando se sabe que es un hogar. Yo quiero a Tejas Verdes. Ningún lugar me pareció antes ser mi hogar. ¡Oh, Marilla soy tan feliz! Podría ponerme a rezar en este momento sin que me resultara difícil.

Y es que este es un libro para todos. Que habla de la amistad, del amor, de la pertenencia a algún lugar, de amar a lo que te rodea y darte cuenta de que las cosas más pequeñas y comunes pueden convertirse en cosas realmente extraordinarias haciendo uso de la imaginación. 

Creo que una chica debe estar preparada para ganarse el sustento, lo necesite o no. Siempre tendrás un hogar en Tejas Verdes mientras Matthew y yo estemos aquí, pero nadie sabe qué pasará en este incierto mundo y no está demás hallarse preparado. 

Me ha encantado la importancia que le dan a la familia. Ana me recordaba terriblemente a mí cuando era más pequeña ya que no me paraba la boca ni un momento y me ha hecho gracia los dramas a las que la chiquilla le ponía atención.

Me dio gusto leer acerca de la interacción con los Cuthbert, ya que poco a poco la niña fue cambiándolos para mejor, a Matthew a abrirlo un poco hacia los demás y a Marilla a traslucir sentimientos, a sentir más allá por todos los convencionalismos y expresar a veces ternura aunque la chiquilla la exasperara un sinnúmero de veces. 

Me gusta este sendero; por allí se puede pensar en voz alta sin que la gente te tome por loca.

Ana es agradable de leer. Una vez que te acostumbras a su vena poética, te hace gracia y cuando poco a poco esta va a creciendo y madurando, te percatas del gran crecimiento que ha tenido el personaje respecto a su llegada a Tejas Verdes. 

Si algo surge en la mente debe decirse. Si uno se detiene a pensarlo lo echa a perder. ¿No ha sentido algo así, señora Lynde?

Los valores están arraigados en este libro. En mostrar tu verdadero yo, en la inocencia y en el que a veces la imaginación así como el ser niños es dejado de lado por la presión social, el qué dirán, que no nos permite desinhibirnos y cuando nos damos cuenta, es demasiado tarde para hacer algo por aquello que dejamos atrás y no podemos disfrutar de igual manera por todas las responsabilidades que nos aquejan. 

La historia ha sido llevada al cine un par de veces así como a la animación así que es bastante antigua y probablemente muchos la recuerden. En mi caso, no la conocía pero muero por ver la peli así como la adaptación a la serie que hizo Netflix, ya que en el libro shipeé algo ja-ja y me gustó bastante el mensaje que transmite. Ya les estaré contando cómo me fue.

Ana la de Tejas Verdes, es un libro para todos. Que habla sobre la amistad, la familia y el amor. El ser nosotros mismos y dejar volar a nuestra imaginación, para de esta manera poder ser felices. 

L. M. Montgomery nació en New London, Prince Edward Island, Canadá en 1874. Falleció en 1942.

Lucy Maud Montgomery (1874-1942) nació en Isla del Príncipe Eduardo (Canadá).

Tuvo una infancia solitaria que la marcaría de por vida. Quedó pronto huérfana de madre y su padre la envío con sus abuelos que la criaron con tal rigidez y soledad que dio rienda suelta a su imaginación lo que luego la llevaría a escribir sus hermosos libros. La juventud la encontró viviendo de nuevo con su padre y su madrastra. Después de completar su educación en Cavendish, continuó sus estudios en el Colegio Príncipe de Gales en Charlottetown. Obtuvo su certificado de enseñanza y posteriormente estudió literatura en la Universidad de Dalhousie, en Halifax, Nueva Escocia. Se dedicó a la enseñanza y trabajó para varios periódicos. 

Ha sido una de las más vendidas y leías así como versionada en el cine; escribió 23 novelas, 500 historias cortas, un libro de poemas y una autobiografía y sin embargo detrás de la imagen de autora triunfadora, vivia la soledad y la depresión que se presume la habría llevado al suicidio. 

En 1908 publicó Ana de las Tejas Verdes, el primero de ocho títulos de la serie que la haría famosa. Posteriormente publicó otros muchos títulos, entre los que se encuentran: Kilmeny of the Orchard (1910), The Story Girl (1911), Chronicals of Avonlea (1912), The Golden Road (1913), The Watchman and Other Poems (1916), Further Chronicals of Avonlea (1920), The Blue Castle (1926), Magic for Marigold (1929), A Tangled Web (1931), Jane of Latern Hill (1937).